26 de Noviembre del 2004. 04:05 PM
- "Ustedes quedan arrestados! Son sospechosos de estafa".
Fue la fulminante orden que dio el que parecía ser el jefe de los uniformados, un tal comandante Salazar, al mismo tiempo que los subordinados procedían a esposar a Manuel, Pablo y a Jeremías. De nada sirvieron ni las explicaciones, ni las identificaciones, ni los documentos que poseían los entrevistadores y mucho menos el vehículo del proyecto ("Cecepito") con un logotipo visible que rezaba "Universidad de Costa Rica".
Según parece, un grupo de estafadores andaba merodeando el barrio, supuestamente otorgando unos premios a cambio de que les dieran un porcentaje del premio, que por supuesto, los pillos cobraban de antemano.
Los vecinos en forma solidaria y organizada, así como deben ser las comunidades, denunciaron el hecho a las autoridades y establecieron una red de comunicación que afortunadamente fue efectiva... pero en las personas equivocadas!
Tremendo susto se llevó el director del Centro, cuando del teléfono público de la comisaría, los muchachos llamaron al director para aclarar el malentendido y los sacaran de la prisión.