Antecedentes
Desde principios de los
sesenta existe la preocupación por estudiar los esquemas de
financiamiento y gasto de la salud de los países. Los estudios iniciales
se llevaron a cabo bajo el auspicio de la Organización Mundial de la
Salud (OMS) y se realizaron en todos los continentes, con especial
atención en los países en desarrollo de África y en América.
Durante las últimas tres
décadas (en particular durante los ochenta y noventa), los gobiernos
comenzaron a llevar a cabo evaluaciones de los gastos en salud y muchos
países reconsideraron sus cuentas de salud, con el objetivo de mejorar
las políticas y los sistemas de información del sector. Por ejemplo, en
1987, el Banco Mundial reportó los patrones de gasto en salud de 49
países y en 1993, el estudio se amplió a 127 países. Pero, estos
estudios no eran lo suficientemente confiables, ni tenían la uniformidad
necesaria para hacer comparaciones (Berman, 1996).
A finales de la década de
los noventa se publicó uno de los resultados más exitosos de la medición
de la Salud. Esta metodología desarrollada por la Organización de
Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) se constituyó en "un
cuasi-estándar para el reporte uniforme de los sistemas de atención de
salud" (OCDE, 2000:13).
En el año 2000, Costa
Rica estimó su primera medición del gasto en salud usando la metodología
de la OECD (Herrero y Collado, 2001). Esta primera aproximación a las
cuentas nacionales de salud coincidió con el interés de la Organización
Panamericana de la Salud, que a principios del siglo XXI estimuló la
iniciativa en el país y formó una comisión interinstitucional para
definir la metodología más conveniente de contabilizar la producción de
Salud en Costa Rica.
Gracias a la experiencia
del Banco Central de Costa Rica se adoptó el Sistema de Cuentas
Nacionales sugerido por Naciones Unidas en 1993 (SCN, 93). Bajo esta
perspectiva y aprovechando el enfoque de la Cuenta Satélite se
construyeron dos mediciones preliminares que contribuyeron a la
definición de los conceptos básicos, sectores productivos de interés,
productos y servicios de Salud, prioritarios en el país (Ministerio de
Salud 2002, 2003).
Con esta base, el
proyecto pretende automatizar la información financiero-contable que
suministran los proveedores de servicios de Salud y crear un software
que facilite el cálculo de las diferentes cuentas de salud e incluso que
armonice estos resultados con otros indicadores importantes para la toma
de decisiones como el gasto y el financiamiento de la salud según
grandes proveedores y sus fuentes.
A su vez, utilizando los
mismos conceptos ya acordados por el Ministerio de Salud y por la
Comisión de Cuentas Nacionales de Salud se va hacer una estimación de la
producción de salud del sector privado, mediante una encuesta
financiero-contable. Las personas que deben responder a esta encuesta
idealmente son los administradores o contadores de los establecimientos
privados de salud. La información que se preguntará es únicamente sobre
la producción, por ende no involucrará aspectos personales de los
informantes.
Al CCP se le ha
adjudicado esta licitación, por su experiencia innovadora en la captura
de datos asistida por computadora, su expertis en el área de la Economía
de la Salud, gracias al proyecto de Investigación en Farmacoeconomía en
Centro América y su participación inicial en la Comisión
Interinstitucional de Cuentas Nacionales.
Justificación
La contabilidad nacional
es un sistema complejo que para minimizar errores requiere del uso de la
tecnología. Por eso existe la necesidad de contratar la elaboración de
un software que automatice el uso de la información y facilite la
obtención de los resultados deseados.
Así mismo, la
contribución que hace el sector privado en la producción de salud es un
reto más para la medición macroeconómica. Una encuesta
financiero-contable periódica que cuantifique este valor y lo añada al
total de la producción es una de las opciones más factibles para medir
la producción de los proveedores de servicios de salud privados quienes
en su mayoría son pequeños y muy heterogéneos.
Estas necesidades,
claramente estipuladas en el cartel LR0141 son básicas para el
Ministerio de Salud, como ente rector del Sistema de Salud de Costa Rica
que requiere de mediciones válidas y objetivas de la producción en salud
(Ministerio de Salud, 2006).
Objetivos
Objetivos generales